Carlos Iván Landa Kerschbaumer
Saben que no la tienen todas consigo. El secretario general de Perú Libre, Vladimir Cerrón, se presentó el miércoles en el programa Portada de Canal N, propiedad del grupo El Comercio, de la familia Miró Quesada, muy identificado con la derecha peruana, aunque si usted revisa la historia observará matices liberales, centristas, progresistas, pero con identidades tal vez conservadores.
Al periodista Beto Ortiz, le pareció extraño que el experimentado colega Mario Ghibellini, entrevistara a Vladimir Cerrón Rojas “el que corta el jamón” parafraseando al destacado hombre de prensa Augusto Álvarez Rodrich, exdirector del diario Perú 21, hoy columnista y comunicador del grupo La República, donde comparte inteligencias con la versada analista Rosa María Palacios.
El combativo Ortiz, que realiza un programa clandestino, desde México, a través de Willax, de la familia Wong, realizó un ácido comentario por levantarse la figura del “peligroso” fundador de Perú Libre, partido que llevó al triunfo a Pedro Castillo, con fondos de dudosa procedencia y bajo el liderazgo de Cerrón Rojas, condenado por los ilícitos perpetrados como gobernador de Junín.
Hijo de líderes comunistas, Cerrón Rojas, quien realizó su formación médica e ideológica en la isla caribeña, y se graduó como médico neurólogo, es un personaje político muy cuestionado por su posición marxista totalitaria, pues cada vez que participa en congresos partidarios, muestra un discurso incendiario : “sin el poder todo es ilusión”, “debemos copar las instituciones públicas”.
¿Amenaza? El secretario general de Perú Libre, dejó preocupados a todos, cuando indicó, que de denegársele el proyecto de Asamblea Constituyente y una Nueva Carta Política, el partido aplicará un plan B, que no es necesariamente el cierre del congreso, Vladimir Cerrón Rojas, no quiso referirse sobre ello, se presume que existe una carta debajo de la mesa que no se desea revelar.
Invitada a Willax para que fije posición, Patricia Juárez Presidenta de la Comisión de Constitución, anunció que en los próximos días se reunirán para tomar decisiones respecto al proyecto de Asamblea Constituyente presentado por el Ejecutivo, indicó que le darán prioridad en aplicación a las normas y reglamentos, sobre el Plan B anunciado por Cerrón, aseguró sentirse muy preparada.
Tras un largo diálogo, donde abordó varios temas, Vladimir Cerrón se refirió a Maricarmen Alva, titular del Congreso, como “la dueña de la casa”, en razón al altercado que tuvo con una alcaldesa provinciana a quien hizo bajar el tono, “porque estoy en mi casa” recibiendo una andanada de críticas, incluso una moción de censura, “porque la casa es de todos, no suya”. Alva fue absuelta.
Aunque algunas veces comete excesos, incluso dejar con la mano extendida al presidente, la sobrina del “lechuzón” Javier Alva Orlandini, exsenador y expresidente del Tribunal Constitucional, ha demostrado ser una mujer de temple que dignifica la memoria de Fernando Belaunde y a la vieja guardia del partido Acción Popular, distante de los legisladores cuestionados de su partido.
