Restos óseos serán entregados a familiares luego de 35 años

Los restos de dos personas víctimas en las bases antiterroristas EP de Haquira, durante el período del conflicto armado, serán entregados a sus familiares en ceremonia especial y posteriormente serán entregados a sus familiares para ser enterrados según sus costumbres en la provincia de Cotabambas.

El primer caso se trata de Uriel Conislla Asto, desaparecido en el año 1988, cuando un grupo de pobladores de la comunidad de Ccasa, lo acusaron ante los militares de tener conversaciones con personas que integraban la organización terrorista Sendero Luminoso. Ante estas acusaciones fue detenido por los militares de Haquira.

Posteriormente, lo llevaron a la base militar de Haquira y posteriormente fue trasladado a la base militar de Abancay, donde lo torturaron durante su permanencia, luego de tres meses lo liberaron, sin embargo, falleció a consecuencia de los golpes recibidos.

En tanto que el segundo caso ocurrió en el año 1989, personal de patrulla de la base militar de Haquira, fueron a la comunidad de Paranani – Tambulla, buscando presuntos colaboradores de la organización terrorista Sendero Luminoso, deteniendo a Tomasa Chumbes Pinares y su hija.

La mujer fue golpeada por los efectivos militares causándole la muerte inmediata, el cuerpo de la fallecida fue dejado en la comunidad de Tambulla, mientras que la hija de la fallecida fue conducida a la base militar y liberada al día siguiente.

La ceremonia se realizará el miércoles 16 de agosto en el auditorio de la Casa de Cultura de Abancay, a partir de las diez de la mañana y tendrá la participación de las autoridades del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, Defensoría del Pueblo, Ministerio Público, entre otras.