La muerte de un humilde agricultor en la comunidad de Huancabamba ha causado preocupación de los pobladores de Aya Muqu al enterarse que uno de sus vecinos, quien se dedicaba a labrar sus tierras, apareció sin vida para el sábado pasado en su vivienda.
HECHOS. En el sector denominado Aya Muqu del distrito de José María Arguedas hallaron a un humilde campesino muerto e identificado como Teófilo Orosco Díaz (67) dentro de su vivienda que sería su dormitorio. El cuerpo sin vida se encontraba tirado en el piso, en posición de cúbito ventral, presentando apuñalamiento con arma blanca (cuchillo y machete) a la altura del cuello, lado izquierdo de la oreja con heridas punzo cortante la que habría causado la muerte del infortunado campesino.
De acuerdo a las primeras indagaciones, el occiso vivía sólo desde hace dos años al tener la pérdida irreparable de su querida esposa; la mañana del sábado un familiar que tenía una reunión con Don Teófilo fue a su domicilio en busca, llamándolo de su nombre por varias veces al cual no respondía; por lo que se acercó a su vivienda para cerciorarse de su presencia dentro de su cuarto, «le llamaba de su nombre, pero él no contestaba y pensé que se había quedado dormido, por eso me acerque hacia la puerta de su dormitorio y vi que estaba tirado en el piso lleno de sangre», señalo su vecino.
Al darse con la sorpresa de encontrar dentro de su dormitorio sin vida entre el charco de sangre, inmediatamente dio parte de lo ocurrido a una de su hijas, luego a la policía nacional del nuevo distrito arguediano.
En el lugar de los hechos se encontró un cuchillo, objeto que habría sido usado por los delincuentes para asesinarlo. Además se presume que el asesinato habría ocurrido en horas de la noche, ya que el difunto se encontraba aún con su ropa que hace indicar que todavía estaría listo para que pueda dormir.
Por otro lado, los familiares señalaron que los autores de la muerte serían ladrones que conocía de los movimientos de Teófilo, toda vez que el infortunado tenía dinero productos de la venta de su cosecha por lo que le delincuentes habrían optado quitar su vida, toda vez que habrían rebuscado toda la casa para llevarse consigo el dinero que siempre lo habría tenido guardado en una buena cantidad.
Al lugar se constituyó la policía nacional, quiénes recogieron las primeras pesquisas para dar inicio a las investigaciones, luego los médicos legales y el representante del Ministerio Público para su constatación del horrendo crimen y dar orden para el levantamiento de cadáver y su traslado a la morgue central para la necropsia de ley.
Los familiares, amigos y conocidos exigen una exhaustiva investigación y dar con los asesinos del poblador, ya que hasta el momento la policía no ha dado información de los asesinatos cometidos desde años anteriores y se presume que este también quedaría sólo en las estadísticas.