Diario Expresión transmitió oficio religioso desde el tradicional santuario de campanayocc.
Teniendo como escenario principal el Santuario de Campanayocc, ayer lunes 14 de setiembre, se realizaron las festividades en honor al Señor de Huanca. La misa estuvo a cargo del Obispo de Apurímac, Mons. Gilberto Gómez Gonzáles y el Párroco de Andahuaylas padre Alipio Oscco Carhuas, la misa se desarrolló a través de las plataformas virtuales, en transmisión en vivo.
En el lugar que contó con la presencia de efectivos policiales, en todos los puntos de acceso, con la finalidad de que los feligreses cumplan con las normas sanitarias y evitar la propagación del Covid-19, participaron del evento, solo los alferados Gilberth Godoy Medina y familia, quienes acudieron a las festividad católica para renovar su fe y pedirle bendiciones al Señor de Huanca.
En un descanso del Homenaje del Señor de Huanca, el alferado Gilberth Godoy, señaló a EXPRESIÓN que por las circunstancias que viene atravesando el país, que son momentos difíciles para todos los pobladores, se ha visto por conveniente suspender la celebración del Señor de Huanca este año, se ha coordinado con las autoridades pertinentes para realizar una misa virtual.
De esta manera, los feligreses de la comunidad puedan escuchar la Santa misa, pues debemos enriquecer nuestra Fe pidiendo al Señor de Huanca sus bendiciones para que nos pueda fortalecer, nos de fuerzas, voluntad y unidad entre todos los pobladores, con el objetivo que el próximo año sigamos siendo alferados, responsabilidad que todos asumimos con mucho cariño.
BREVE HISTORIA
El «Señor de Huanca» es la imagen del Cristo martirizado que causa gran fervor y devoción entre los católicos. Cada año, en el mes de septiembre, los fieles asisten al lugar de Huanca ubicado en nuestro caso, Santuario de Campanayocc, según los devotos, es el lugar que Dios eligió para vivir.
La historia cuenta que los españoles pasaron por su lado y no lograron verlo, un milagro había ocurrido en ese instante, Diego logró escapar no sin antes ver la figura de Cristo Martirizado, lleno de latigazos y marcas de abuso, Diego pensó, este es el Dios de los oprimidos y prometió volver.
Al poco tiempo Diego volvió con toda su familia y logró hacer pintar la visión que tuvo, justamente en la roca en la que se guareció, hasta el lugar llegó un montón de gente con él y se llevó a cabo la primera peregrinación hasta lo que sería el Santuario del Señor de Huanca.
